Las estaciones ferroviarias son emplazamientos que sufren grandes corrientes de aire por sus condiciones especiales. Son espacios muy grandes, diáfanos y con numerosos y grandes entradas. Además, la zona de andenes y sus accesos ejercen un efecto chimenea con los gases de los trenes y también se genera un cambio de presión entre andenes y vestíbulo de la estación. Para bloquear todas estas corrientes, lo más efectivo es recurrir a cortinas de aire.
La cortina de aire, que cumple una función de barrera invisible, es una solución eficaz en muchas situaciones y Airtècnics la ha implantado en diversas estaciones, tanto de metro como ferroviarias, viendo alcanzado con éxito su finalidad y a la vez haciendo más confortable la experiencia de los usuarios.
La cortina de aire Dam Twin, dispuestas en verticual una frente a otra, tienen la función de evitar que corrientes de aire de succión de los trenes se generen en los pasillos de las estaciones, de forma que los viajeros tengan una experiencia lo más confortable posible.
En las escaleras de acceso de los andenes al vestíbulo se han instalado cortinas de aire Windbox con el fin de evitar que el clima del vestíbulo se vea afectado por las corrientes de aire y el efecto chimenea que genera la conexión con los andenes.
Y una cortina de aire Zen informa a los pasajeros de a dónde se dirigen:
En los lugares en que los inviernos son fríos como en Austria, cuentan con cortinas de aire en las entradas para trenes. Para este caso se eligió una cortina de aire industrial Maxwell vertical pues las puertas son muy grandes y se requiere mucha potencia.
Los accesos de la calle de la estación central de Ámsterdam se encuentran muy cerca de las escaleras y se genera una corriente en los pasillos debido, también, al cambio de presión que ejerce el tren por los túneles. Esta situación genera una experiencia desagradable para los usuarios. Gracias a dos cortinas de aire Rund, enfrentadas en el pasillo, este problema se solventa.
Noticia sobre cortinas de aire:
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