El confort de los clientes y comerciantes en el mercado de Sant Antoni, en Barcelona, está garantizado gracias a las cortinas de aire Airtècnics instaladas en los 16 accesos del recinto, ubicados en cada uno de los cuatro extremos de la cruz griega que forma la planta del edificio.
El popular establecimiento, con multitud de puestos de venta al detalle, es una construcción del arquitecto Antoni Rovira i Trias, terminada en 1882 y que formaba parte del plan Cerdà de reurbanización de Barcelona.
Durante los años 2009 a 2018, el emblemático edificio se sometió a reformas con el fin recuperar el esplendor que en reformas anteriores había perdido y de modernizar las instalaciones.
Después de las quejas de los comerciantes debido a las corrientes de aire, se instalaron las cortinas de aire Airtècnics. Los modelos escogidos fueron Recessed Compact en 12 puertas automáticas. Y en las cuatro grandes puertas de la parte central del mercado se instalaron cortinas de aire Windbox de 2500 mm. De esta forma, se anulan las corrientes de aire que se generan en un edificio con esta fisionomía.
Además, la climatización del mercado es sustancialmente más económica gracias al ahorro energético que favorecen las cortinas de aire. Al crear una barrera invisible durante la apertura de las puertas, el intercambio de aire entre el interior y el exterior es nulo.
Todas las reformas y mejoras que ejecutó el estudio de arquitectura encargado del proyecto le han valido a lo largo de los años diversos premios, como el “Tres diamantes de Mitsubishi”, otorgado en la 6º edicióm por ser uno de los edificios más eficientes durante el 2019 y de mayor proyección de ahorro energético gracias a sus instalaciones más sostenibles.